Ya no laten dos corazones dentro de mí.
El día nueve de julio vino al mundo un pequeño ser. Lo hizo con un mes de antelación, algo que alteró (bastante) los planes. Yo sabía que vendrías antes… ¡pero no tanto!
Estos ocho meses no han supuesto una dulce espera para mí. Mi carácter, mis miedos, las náuseas y mi afición por la cerveza han hecho que el tiempo pasase muy lentamente.
Y, de repente, estás aquí.
Y, sin saber cómo, te quiero. Te queremos. Y siempre lo haremos.
Solo te conocemos desde hace doce días, no llegas ni a los tres kilos y ya no me imagino la vida sin ti. Tiene mandanga esto…
No lo sabes aún, pero te rodea el amor. El amor de muchos, no sabes cuántos. Y si tu abuelo estuviera aquí te regalaría todo el que llevaba dentro, como hace tu abuela, la que lloraba cuando le di la noticia.
El de Killo también lo tendrás. Solo necesita unos días para adaptarse a la llegada del hermano humano.
Y que sepas que, si ya quería a tu padre antes, ahora lo quiero más todavía. Aunque le gusten Los Planetas (como a todos los puretas).
Aunque hayas venido a parar a un mundo feo, espero que tengas una vida maravillosa.

Bonito, como la madre del velocista. Un besazo a esa familia recién parida!!
Enhorabuenaaaaaaaa